ÁLBER 4

Escritor, bloguero, creador de sueños

Nací en Valladolid dice mi carnet hace muchos años, sin embargo, mi espíritu me dice lo contrario, acostumbrado a estar con niños, cojo de ellos su vitalidad y magia siempre que puedo.

Entre esos años que pone mi carnet, aproveché para estudiar carreras y sumar diplomas al mismo tiempo que me iba dando cuenta de lo poco que valían en la vida.

Ahora busco transportar a la gente a los lugares que mi mente me lleva. Espero que disfrutéis del viaje...

Premios

He tenido el privilegio de ser galardonado en alguna ocasión, pero siempre me han importado más las felicitaciones de aquellos que me importan.

  • 2013 - Premio Ingeniería sin fronteras - Tenemos Derecho

Un grupo de música

El que volverán a formar John, Paul, George y Ringo en alguna dimensión

Un libro

Barcelona se sumerge en La Sombra del Viento, pero en el fondo es La Ciudad de los Prodigios.

Un color

El verde, aunque nos secuestren la esperanza.

Una ciudad a la que irías

Nueva York, a ver si es verdad eso de que nunca duerme.

Un deportista

Michael Jordan, que me llevó de niño en su aerolínea muchas madrugadas.

Un objeto

Los que he perdido.

Lo que más valoras

La amistad cómplice que puede ser algo más.

Un rincón de Valladolid

El de los amantes del Campo Grande.

Un olor de la infancia

El de los tebeos cuando nadie los llamaba cómics.

Una canción

Moonlight Shadow para la nostalgia, Born To Run para escapar de ella y La Senda del Tiempo para entenderla.

Una película en otoño

Cualquiera de Lars Von Trier que nos destruya de Melancolía.

Una estación

La de autobuses de Valladolid en una mañana fría y soleada de otoño.

Lo primero que recuerdas

Lo primero que se me olvidó

Un sueño que se repita

Demasiado perverso como para contarlo, incluso en democracia.

Un sonido que te emocione

El de la última campanada.
Álber 4 biografía

Todo es susceptible de ir a peor

David
Biografía
Algo sobre mí

Mi carrera literaria comenzó cuando era muy niño. Las primeras imágenes que tengo de mí mismo elaborando relatos y cuentos, tan imaginativos como mal escritos, se remontan a una época indeterminada de mi infancia.

Cuando era adolescente, la cosa adquirió un tinte un poco más serio y empecé a sentir gusto por la poesía, algo que ya no me ha abandonado jamás, aunque sólo una pequeña parte de mi obra poética, la más reciente, está publicada en mi blog, La Buhardilla de Álber, donde soy mucho menos formal que en esta biografía.

En aquellos años también inicié la andadura por la prosa de largo recorrido, aunque no sería hasta 2007 cuando un seudosello editorial de cuyo nombre prefiero no acordarme publicase mi primera novela La Máscara del Mundo. Es una historia de suspense con cierto trasfondo filosófico en el que se ahonda sobre todo en las relaciones de amistad.

A finales de 2013, autopubliqué únicamente en formato digital La Noche, de temática bastante distinta a su predecesora, perteneciente al género fantástico y de terror, y más orientada al público juvenil –de hecho el proyecto y su parte esencial nacieron antes de que tuviera edad para votar.

Ese mismo año concluí una obrita que engloba varios relatos muy míos, llenos de ironía y acidez, aunque sin renunciar a alguna dosis de dulce, llamada Acertijos de Vida, todavía inédita, si bien algún día pretendo remediarlo. Uno de ellos, Tenemos Derecho, fue premiado con un accésit en un concurso organizado por la ONG Ingeniería sin Fronteras. Lamentablemente, ahí se acaba mi historial de galardones oficiales, aunque me quedo con los halagos que de cuando en cuando mi brinda mi agradecido y cariñoso público.

En 2016 finalicé el que es hasta la fecha mi gran proyecto literario, Enmascarados Por el Mundo, una ambiciosa historia perteneciente a un gran conjunto de novelas del que también forma parte La Máscara del Mundo.

La primera parte de esta suerte de crónica de la generación millenial española, con mezcla de géneros que van desde el suspense hasta el terror y la fantasía, pasando por el género político y social, se titula El Secuestro de la Esperanza, mi tercera novela. Hay dosis de surrealismo y un relato metafórico marca de la casa, que no marca España. En 2017 por fin ve la luz en formato físico gracias a la autoedición y con la ilusión de que se traduzca en recompensa el gran esfuerzo personal invertido.